De tu cuerpo
Desamparo
En esas vísceras horrendas
Quien juzgue
Al averno
Quien someta nombre a la ignominia
Al abismo tajo y fosa
En viles capas de orfandad
Tu puño y voz
Atrapan la furia del cansancio
La extenuación del relámpago
La rendición en triste
Triste
Desencanto.
Ingrid Odgers
No hay comentarios.:
Publicar un comentario